Escultura de Moisés de Miguel Ángel
La escultura de Moisés de Miguel Ángel Buonarroti (1475-1564) fue tallada entre los años 1513 y 1515, en la época del Cinquecento del Renacimiento italiano, y se encuentra actualmente en la basílica de San Pietro in Vincoli en Roma, Italia.
La escultura fue un encargo del Papa Julio II (Giulio II en italiano) para su mausoleo en la basílica donde se encuentra actualmente.
Moisés representa al Moisés bíblico en el libro del Éxodo. La obra retrata el momento en que Moisés desciende del monte Sinaí con la tabla de los diez mandamientos y se encuentra con los israelitas adorando a un becerro de oro.
Moisés está enmarcado por otras siete figuras secundarias que constituyen en su conjunto la fachada de la tumba del papa Julio II. Al lado derecho e izquierdo de Moisés, personaje principal, se encuentran Raquel y Lea, las hermanas descritas en el libro de Génesis que se involucran en un enredo matrimonial de cuyos descendientes forman el linaje de Jacob.
La escultura de Moisés está hecha de mármol, mide 253 centímetros de alto y se encuadra dentro del realismo.
Análisis de Moisés de Miguel Ángel
Moisés está hecha de un solo bloque de mármol de Carrara, lugar predilecto para mármoles de buena calidad.
El escultor Miguel Ángel consiguió darle un realismo extremo a Moisés aplicando la técnica de contrapposto, que, a pesar de ser usada en figuras en pie, logra aplicarla a esta pieza. En efecto, se consiguen distinguir los fundamentos básicos de esta técnica que consiste en el soporte del peso del cuerpo en una pierna o lado creando un contrapeso del cuerpo que obliga al torso a crear una pequeña curvatura en forma de s.
Moisés es una obra hecha en la etapa más madura en el arte de Miguel Ángel. El dominio del contrapposto, realizado a la perfección en su escultura David, se intensifica con el dominio de la creación de movimiento en potencia observado en Moisés.
A pesar del personaje estar sentado, el lenguaje corporal, la forma en que sujeta las tablas con los diez mandamientos mientras juega con su larga barba y la posición sentada de pasividad que contrasta con su expresión de acción otorga a la escultura de Moisés una dimensión más profunda y humana.
Una de las características que llama la atención en la escultura de Moisés de Miguel Ángel son dos protuberancias que salen de la cabeza. Los expertos explican que esta representación de algunos personajes de la Biblia era común debido a la traducción errónea de la palabra hebrea que indica rayo (karan) por keren, palabra hebrea que significa cuerno.
La complejidad en la expresión del Moisés, abarcando distintas emociones a la vez, aproxima a Miguel Ángel al manierismo propio de los artistas del Bajo Renacimiento (úitlmas décadas del Renacimiento) y, poco a poco, este cede el paso al movimiento cultural barroco que aparece después de la escuela del Renacimiento y es, en algunos aspectos, contrario a este.
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